Los colores de una oficina
La elección de los colores está relacionada con la función de la habitación de la que surge la necesidad de calma o dinamismo. La oficina puede, según cada familia, ser un espacio de almacenamiento dedicado a la administración, el estudio o la lectura (privilegiará los llamados colores fríos y relajantes, facilitando la concentración como lavanda, azul y beige). ); Es un espacio de trabajo separado. Cuando la oficina se utiliza para una actividad profesional y comunicativa, el ambiente general debería ser más tónico gracias a la elección de colores brillantes (blanco) o colores cálidos como el amarillo, el naranja y el rojo.
Los colores para la oficina y cómo generan un ambiente beneficioso
El estado de ánimo afecta directamente con la productividad en el trabajo. Cuanto más animados y felices estamos, más productivos somos en la realización de actividades. Es por ello que elegir de forma correcta los colores para la oficina nos va a producir estímulos que pueden modificar nuestros estados de ánimo.
¿Qué tener en cuenta para escoger los colores?
Debemos tener en cuenta cómo de grande es el espacio qué vamos a pintar. Si se trata de una oficina pequeña o amplia. En el caso de tratarse de un lugar pequeño tendremos que escoger colores que den la sensación de amplitud. El tipo de actividad que se realiza en nuestro espacio de trabajo es importante para escoger los colores para la oficina. No pintaremos las paredes del mismo color si se trata de una aseguradora o de una empresa desarrolladora de videojuegos. También podemos prestar atención al tipo de trabajo que se realizará en la oficina, si los trabajos en equipo son comunes o los empleados desarrollan las actividades de forma individual.
No todas las paredes de las oficinas deben pintarse de un solo color, sino que deben preferirse dos paredes. El primero, ubicado detrás del escritorio, visto por nuestros clientes o colaboradores, nos enmarca como una carcasa protectora. Este muro está asociado con nuestra imagen profesional y, idealmente, debe colorearse en un tono más intenso que otros: por ejemplo, burdeos (asertividad), ladrillo naranja (creatividad), ocre amarillo (comunicación).
La segunda pared a pintar si se encuentra frente a la oficina o cerca (dependiendo de la configuración de la habitación): es el espacio que inspira a quien trabaja y cuyo color se elegirá según los gustos y su efecto sobre el bienestar. ser: por ejemplo, gris para la organización, blanquecino para mayor claridad mental.
Los colores recomendados:
- El blanquecino, para mayor claridad.
- Amarillo ocre, para la comunicación.
- Naranja ladrillo, para la creatividad.
- Rojo y burdeos, para asertividad y perspicacia comercial.
- Gris, por el sentido de organización.
- Lavanda, para escritura y meditación.
Colores que deben evitarse:
- El rosa, por el lado demasiado amable e ingenua en el trabajo.
- Negro, para aislamiento y retiro.
- Marrón, por estancamiento y falta de creatividad.
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